Las centrales nucleares hasta funcionando bien, son un riesgo para la contaminación y para la salud de las personas. Porque con el proceso de fusión atómica para obtener energía, se producen una gran cantidad de residuos radiactivos muy contaminantes que van a tardar millones de años en desaparecer. Estos residuos son un problema, porque ningún país quiere convertir su tierra en un cementerio radiactivo, y sobre todo en islas como Japón e Inglaterra que tienen menos territorio salen en buques cargados con estos materiales buscando otros destinos, con gran peligro de que se produzca un accidente en su transporte y acaben contaminando todas las aguas del mar. Además de todo esto siempre existen algunos escapes que no hay forma de evitarlos y entonces se produce una gran contaminación ambiental, no solo donde está la central sino en todo el medio. Los residuos contaminantes que generan las centrales nucleares se esparcen por toda la biosfera, entran en las cadenas alimenticias y pueden llegar a nosotros los humanos. Esto es lo que pasa en las centrales nucleares funcionando más o menos dentro de la normalidad y ya supone un gran riesgo para el futuro de nuestro planeta.
Lo peor viene cuando se producen accidentes nucleares que hacen que se escapen grandes cantidades de elementos radiactivos altamente contaminantes y llegen a la atmósfera y al agua. Entonces si que podemos decir que las consecuencias son catastróficas no solo a corto plazo, sino que por muchos años que pasen no se consiguen eliminar del medio. Casi todos los problemas que han tenido las centrales nucleares vienen porque se utiliza la desintegración del átomo para calentar agua; y esto necesita circuitos de refrigeración porque la desintegración del uranio 235 produce una cantidad inmensa de calor, que se ha de poder controlar para poder mover las turbinas, por un lado, y por el otro necesita refrigeración y si falla es cuando puede ocurrir el accidente. Todos los accidentes se han producido en este punto crítico. ¿Por qué puede fallar la refrigeración? Pues porque fallan estos sistemas, como ocurrió en Vandellós I, donde hubo un accidente que estuvo al borde de haber sido muy grave. Evidentemente, todos los sistemas nos dicen que son muy seguros, pero han fallado más de una vez. Puede fallar también el sistema de energía eléctrica, puede haber errores humanos. Y siempre por mucha seguridad que nos digan que tienen la experiencia nos dice que nunca es la suficiente ni compensa los riesgos, porque sin exagerar la liberación a la atmósfera de grandes cantidades de radiactividad, puede acabar con todo tipo de vida humana en la tierra incluída la nuestra.
Uno de los grandes accidentes nucleares fue el de Chernóbil. Se produjo el 26 de abril de 1886 y es el accidente nuclear más grave de la historia y uno de los mayores desastres medioambientales que han ocurrido en la tierra.
Se produjo cuando se hacía una prueba de simulación de corte de suministro eléctrico y de repente subió de potencia el reactor número cuatro y esto hizo que se calentara el núcleo del reactor nuclear, lo que provocó una explosión de de hidrógeno y la expulsión a la atmósfera de elementos altamente radiactivos y tóxicos, quinientas veces mayor que los liberados por la bomba atómica de Hiroshima. Directamente murieron 31 personas y el gobierno de Rusia tuvo que evacuar a 116.000 personas y además se detectó una subida enorme de radiactividad en 13 paises de europa.
Después del accidente se hizo un proceso de descontaminación en el que participaron 600.000 personas y se aisló un área de 30 km. Los trabajos de descontaminación y de contención evitaron una segunda explosión que hubiera sido de consecuencias enormes para Europa.
Más de 5.000.000 de personas vivieron en áreas contaminadas por radiación y 400.000 en áreas muy contaminadas, sin embargo hasta hoy no se sabe exactamente cuantas personas han muerto a cosecuencia de estas áltas dosis de radiación, pero se considera que miles y además está el aumento de casos de cáncer y demás enfermedades relacionadas con el exceso de radiación.
El reactor afectado se ha enterrado y se ha visto degradado por varios fenómenos naturales por lo que existe el riesgo de desplomarse y poder ocasionar nuevos problemas y se está construyendo otro sarcófago para enterrarlo, con lo cual todavía hoy existen grandes peligros para que se produzcan nuevos accidentes, porque una reacción nuclear que se produce en un reactor fuera de control no puede pararse y continua generando graves peligros.
Además ahora hace unos meses se produjo otro gran accidente nuclear el de Japón contra el cual se continua luchando.
Por todo esto pienso que la energía nuclear no es la que tenemos que tener, los gobiernos deben apoyar la investigación en energías alternativas no contaminantes, como la solar.
Todos debemos manifestarnos en cotra de las centrales nucleares, porque a pesar de todo lo que se diga: no es una energía limpia, contamina, genera residuos radiáctivos y en caso de acccidente las consecuencias son tan grandes que da miedo pensarlas. Porque pueden acabar con toda la vida en la tierra.
Estas son diez razones para estar en contra de esta energía para que todos nos manifestemos en su contra:
1. La energía nuclear es peligrosa
El caso de Chernobil es probablemente el mejor ejemplo de ello, y el más conocido.
2. La energía nuclear es sucia
Gegenera residuos radiactivos que permanecen durante decenas de miles de años.
3. La energía nuclear genera poco empleo
Según un estudio de CCOO, la energía nuclear genera menos empleo que cualquiera de las renovables.
4. La energía nuclear es cara
Solamente la gestión de residuos radiactivos cuesta miles de millones de euros, por lo que la existencia de la energía nuclear está condicionada a las aportaciones de dinero público.
5. La energía nuclear no es necesaria
Con voluntad política es posible vivir sin ella y reducir al mismo tiempo la emisión de CO2. Alemania y Suecia son dos claros ejemplos.
6. La energía nuclear no contribuye a la lucha contra el cambio climático
Es más, está excluida del Protocolo de Kioto.
7. La energía nuclear no nos permite ser energéticamente independientes
Basta con decir que España importa el 100% del uranio que se emplea como combustible en sus centrales nucleares.
8. La energía nuclear no es infinita
Las reservas de uranio-235 tienen fecha de caducidad dentro de no muchas décadas.
9. La energía nuclear no genera simpatías
La mayoría de los ciudadanos la rechaza, no tiene respaldo social.
10. La energía nuclear no es sostenible
No es económicamente eficiente, no es medioambientalmente aceptable y tampoco socialmente justa.
PILAR MARTÍNEZ
