I.- Existe pero no se mueve; acompaña al cuerpo sin ser del cuerpo: el alma.
Sin embargo, ¿qué cuerpo toma el alma cuando abandona el cuerpo?; ¿en qué consistiría la resurrección de la carne?
No parecen problemas sencillos que puedan ser reducidos a lo observable, a la psicología en definitiva.
II. Toda multiplicidad ha de estar compuesta por unidades. Pero si la materia es infinitamente divisible y está infinitamente dividida, dichas unidades no podrán ser materiales, sino inextensas e intelectuales.
Podrías replicar que linfinitamente divisible está compuesta por infinitas unidades materiales. Sin embargo, eso supondría dar al término unidad un significado distinto del común. Una unidad, es decir, un ser, no puede descomponerse sin perder su esencia. Con más razón si dicha descomposición es infinita. Por eso distinguimos entre los seres vivos (con alma, individuados) y los seres inanimados (sin alma, cuantificables). De lo contrario, cada ser contendría en sí infinitos seres, y en realidad ninguno.
Si aceptas esto verás que la segunda pregunta se contesta por sí sola. Lo que en uno puede cambiar, ya que no es posible añadirle ni quitarle nada. Sólo crearlo o suprimirlo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario